La reciente reordenación territorial de Telefónica, comunicada en la última Junta
General de Accionistas, ha sido observada con interés y preocupación desde UGT, toda vez que, como manifestamos durante la negociación del Convenio, ésta podía introducir factores de distorsión en el normal desarrollo de las relaciones laborales cuya normalización, mediante la negociación permanente por la que nuestra organización viene decididamente apostando, es, a nuestro juicio, una de los principales motivos por el que en Telefónica se mantienen unas determinadas condiciones laborales a pesar de la difícil situación que atraviesa la economía en general y el sector de las comunicaciones en particular. Precisamente por ello insistimos en la necesidad de mantener un clima de diálogo y concertación análogo al logrado en los últimos años, desde muestras posturas diferenciadas pero no antagónicas, de forma que podamos mantener los logros alcanzados y promover otros igual de ventajosos para ambas partes.
La citada territorialización, que sin duda debe contribuir a una mejor ubicación de nuestra empresa en el difícil entorno actual y consolidarla de cara al futuro, no debe enturbiar ni entorpecer la capacidad de diálogo alcanzada, ni por supuesto interferir en la concreción de los compromisos adquiridos por la empresa en cuanto a traslados o la integración de móviles.
Entendiendo por nuestra parte que actualmente se están adoptando decisiones de gestión a nivel territorial en materias que están bajo el amparo y tutela del vigente convenio colectivo, como en materia de cambios de acoplamiento, reestructuraciones organizativas o formación, por ejemplo, creemos que tales medidas deben enmarcarse dentro de cauces de diálogo sistemáticos y eficaces que permitan la extensión horizontal y vertical de los acuerdos que con tanto esfuerzo hemos sido capaces de conseguir, precisando para ello un interlocutor válido, que pueda y tenga capacidad para proporcionar las respuestas a los problemas, desistiendo de la actual dispersión de interlocutores que solo pueden conducir a soluciones parciales, a la
postre siempre ineficaces.
Por ello desde UGT hemos manifestado tanto a los nuevos responsables de las Operaciones de la Empresa como a la Dirección de Relaciones Laborales la urgencia de establecer una interlocución a nivel territorial que permita mantener la fluidez del diálogo y la negociación y que posibilite la extensión de los acuerdos alcanzados a nivel general en cada una de las demarcaciones operativas en que se ha dividido la empresa, soslayando las dificultades que la nueva estructura está generando.
UGT Comunicaciones.
